Dicen que la palidez está de moda, incluso que es elegante, pero no nos engañemos, llega el verano y a todas nos gusta lucir un poco de ese moreno tan favorecedor pero ¿qué podemos hacer si no vemos el sol más que por la ventana? En mi caso, no me fío de los rayos uva y con el autobronceador tengo una especie de relación amor-odio de la que ya os hablaré más adelante, así que en los últimos años he recurrido a los polvos de sol para darle un poco de color a mi rostro tono blanco nuclear.
Los primeros polvos que usé y que he usado por años (¡Y aún me duran!) son los Irréelle Soleil de Chanel en tono Sierra, un color precioso, camel tostado con un ligero toque de brillito dorado muy discreto. Me hice tan fan que comencé a usarlos durante todo el año como colorete. La ventaja es que coordinan a la perfección con cualquier look, natural o con ojos muy marcados, o con labios rojos, ya que se puede modular la intensidad. La desventaja, que Chanel cambia los tonos y las texturas de sus productos con mucha frecuencia y como duran siglos, si se te acaban es casi imposible que encuentres los mismos.
Los primeros polvos que usé y que he usado por años (¡Y aún me duran!) son los Irréelle Soleil de Chanel en tono Sierra, un color precioso, camel tostado con un ligero toque de brillito dorado muy discreto. Me hice tan fan que comencé a usarlos durante todo el año como colorete. La ventaja es que coordinan a la perfección con cualquier look, natural o con ojos muy marcados, o con labios rojos, ya que se puede modular la intensidad. La desventaja, que Chanel cambia los tonos y las texturas de sus productos con mucha frecuencia y como duran siglos, si se te acaban es casi imposible que encuentres los mismos.
Y ahora os quiero hablar de mi último descubrimiento, los polvos Hoola de Benefit. Desde que conocí esta marca en EE.UU, siempre quise probar una de sus famosas cajitas pero, sinceramente, esta no era la que más me atraía. Sin embargo, hace unos meses fui al Sephora de la calle Velázquez (Madrid) a probar el Brow Bar de Benefit y tras hacerme las cejas, me maquillaron y entre los productos que utilizaron estaban los polvos Hoola.
Al principio pensé que la chica se había vuelto loca porque, realmente, soy blanquísima, pero para mi sorpresa, cuando me dio el espejo para que me viera, tenía un tono precioso. Cuando llegué al trabajo, mis compañeras me preguntaron si había estado tomando el sol, ¡viva el moreno de bote! Así que, como imaginaréis, cayó en mis manos y desde entonces no he dejado de usarlo. A diferencia de los Irréelle Soleil, son totalmente mate, por lo que suelo usarlos utilizando la famosa técnica del tres y justo encima de los pómulos me pongo un poco de colorete, normalmente Orgasm o Luster, ambos de Nars, que me dan un poco de brillo y luminosidad.
¿Cuáles son vuestros polvos de sol favoritos? ¿alguna recomendación? Tengo muchas ganas de probar los Laguna de Nars y creo que al final caerán...
